miércoles, 13 de junio de 2012

RIO DE JANEIRO: “MORO, NUM PAÍS TROPICAL ABENCOADO POR DEUS E BONITO POR NATURALEZA… MAS QUE BELEZA” (Del 8 al 13 de Junio)


 La propaganda basura que llega vía medios de comunicación a España sobre Brasil, es que es un país peligroso, que te van a asaltar a punta de pistola por la calle y que hay que andar con mucho ojo. Una vez mal, falsa alarma. La cuestión es que en Europa vivimos en países super seguros. También porque la inmensa mayoría de la población somos de nivel medio, y otra serie de razones socio culturales en las que no voy a entrar. Está claro que si en Brasil dejamos nuestra bolsa en la playa y nos vamos a dar un baño, cosa que hacemos frecuentemente en España, lo más probable que cuando salgas no la tengas, pero de ahí a disparos y asaltos a todas horas queda lejos. Qué pensará cualquier extranjero  de la seguridad de España y se queda únicamente con la opinión de un paseo por las Ramblas o en el metro de Barcelona o Madrid y le roban todo en un descuido.

Para mi Brasil ahora es esta canción : PAIS TROPICAL. Gente alegre y cálida, que necesitan el contacto físico como muestra de cariño, que sonríen todo el tiempo, que les gusta estar en la playa haciendo deporte, paseando o disfrutando. Que les gusta la fiesta, bailar hasta no poder y disfrutar con la gente que está a su alrededor sin importar quien sea, y tampoco su color o nacionalidad. Aquí dejo otro tema para ambientar la lectura, TCHU TCHA TCHA. Este último no se si se escucha en España, pero llegará, seguro!


Llegué a Rio de Janeiro en viernes, ya me habían dicho del super ambiente de esta ciudad, pero claro salir solo y de noche, quizás no es lo más recomendable en esta ciudad. Pero otra vez el camino me pone delante gente amable que quiere mostrarme su país, con los que pos supuesto hice de embajador de la tortilla de patata. Mis compañeros de habitación de hostel se encargan durante viernes, sábado y domingo de mostrarme la ciudad de noche, las dos primeras acudiendo a una discoteca – museo llamada SCENARIUM, y el domingo al concierto de Ivete Sangalo, en un parque cerca de Maracaná, una musa actual de la música brasileira. Aquí os dejo un par de temitas para que los bailéis en España: CHUPA TODAACELERA AE


Durante el día caminar por Ipanema, Copacabana, Leblón y La barra, que aunque no está en su mejor esplendor veraniego, ya que ahora es invierno y estamos a 23 grados y llueve algo casi todos los días, sigue siendo un espectáculo ver a la gente surfear, jugar al volley, patinar…


Fotos de Rió de Janeiro AQUÍ.

La verdad es que Río es una ciudad curiosa. Es muy grande, y está rodeada de bonitas playas e islas. Tiene varios lagos y montañas verdes y empinadas, que forman una ciudad compleja, pero que me gusta mucho. Todo el centro de Río de Janeiro es una zona segura y muy animada, con edificios típicos de cualquier capital. Eso sí en los morros se ven las famosas favelas, donde se apiñan las casas unas sobre otras, y también las personas. En algunas viven más de 300.000 personas, y por lo visto estos lugares sí que son realmente peligrosos ya que están controladas por bandas de narcotraficantes algunas, y policías corruptos otras. Aunque vamos ahora la cosa debe estar bastante tranquila. Hay que recordar que dentro de dos años hay un campeonato del mundo de fútbol y dentro de cuatro unos juegos olímpicos, y el ayuntamiento de la ciudad y el gobierno del país, se están encargando de lavar la imagen del país y aumentar la seguridad. Estoy convencido que estos dos eventos van a ser recordados como de los mejores de la historia. Ya están con las obras, y la villa olímpica tendrá playa privada para los deportistas. Ojalá pueda estar entre el público en los Juegos Olímpicos del 2016.


Hoy he intentado subir al Cristo, una de las maravillas del planeta del mundo moderno, pero estaba tan nublado que no se veía, así que me he dado la vuelta y lo intentaré mañana de nuevo.

Saludos desde Río de Janeiro, fascinado. Otro temita para terminar NAO QUERO DINHEIRO

PLAYA JOAQUINA, FLORIANOPOLIS: SUR DE BRASIL. Del 4 al 7 de Junio de 2012.



De Foz de Iguazú a Floripa hay unas 14 horas de viaje y los servicios de bus, aunque no son tan buenos como en Argentina, están bastante bien, viajas cómodo y son algo más baratos. Esta ciudad es algo peculiar. Está formada por islas y lagos, por lo que para llegar desde la terminal hasta las mejores playas para hacer surf, debes hacer un recorrido de casi dos horas.


Hay muchos hostel en Florianopolis, pero quería estar muy cerca de la playa, para poder estar en el mar todo el tiempo, pero esta zona de costa es bastante virgen y los primeros alojamientos económicos están a 20 minutos caminando, por lo que decido alojarme en el Che Lagarto Hostel, el más próximo que encontré.


Mi intención en este lugar era hacer surf todos los días, mañana y tarde. Prácticamente desde los gloriosos días de Lobitos en Febrero, sin contar los dos días de surf en Punta del Este el mes pasado, no me daba un baño en el mar, y tenía muchísimas ganas de surfear de nuevo. Mi gozo en un pozo. Una vez más en uno de los lugares más famosos y con mejores olas del mundo, el mar no me ofrecía lo que deseaba. No solo eso, sino que además, llovía, hacia viento y frío.

Así que durante los dos primeros días, paseos por la playa pasados por agua, cocinar, leer y escribir…


Al tercer día llegaron las olas y salió el sol. Y pude disfrutar de una de las mejores surfeadas de todo el viaje. Olas de 1 – 1.5 metros y tres personas en el agua. Disfruté como un enano, que gozada. La verdad es que este viaje está mereciendo la pena por muchas cosas, pero con las horas de frustración que he pasado entre las olas en España, intentando progresar en este deporte, dificilísimo, el más complicado que he practicado, y ahora puedo surfear casi cualquier tipo de ola de tamaño moderado y con cualquier tabla, me satisface mucho. No paré de sonreír durante las tres horas que estuve en el agua, hasta que cambio el tiempo y se acabaron las olas. Desde luego que mereció la pena.



Fotos de Floripa AQUÍ

Al día siguiente, otra vez viento, lluvia y frío, parece que iba a continuar así unos días más, vaya imagen que me estoy llevando de Brasil. Mientras tanto me llegan de España más de 30 grados. Decido continuar el viaje hacia Rio de Janeiro: Ipanema, Copacabana, Leblón… allí voy!!!

martes, 12 de junio de 2012

"MI PRIMERA" MARAVILLA NATURAL DEL MUNDO: CATARATAS DE IGUAZÚ, 2 DE JUNIO DE 2012.



De las 7 maravillas del mundo natural cuatro se encuentran en Asia, una en África y dos en Sudamérica. Mi visita a Iguazú supone tachar una en la lista. Habrá que plantearse un viaje a Asia en el futuro para visitar la mayoría de ellas. En cualquier caso, Perito Moreno, Gran Cañón del Colorado, Yosemite o algunas playas de Hawaii o Costa Rica, son maravillas de la naturaleza que he visitado en este viaje, y que perfectamente podrían ser una de las siete, y supongo que como esto, mil rincones del planeta.

De Paraná, acompañado por Walter, a Iguazú en bus. Unas 16 horas. Último destino argentino, para posteriormente cruzar a Iguazú. Como viene siendo costumbre viajamos de noche para avanzar mientras duermes y ahorrar tiempo y dinero. Sobre las 10 am llegamos a Puerto de Iguazú, nos alojamos en el Hostel Marco Polo Inn, justo enfrente de la terminal, por 55 pesos la noche con un excelente desayuno incluido.

A las 11 ya estábamos en el colectivo que te lleva a la entrada del parque. Cuesta 10 pesos por trayecto, y la entrada para no argentinos 130 pesos.

Junio es temporada baja, por lo que no había mucho visitante y así puedes disfrutar de las vistas y diferentes cascadas sin aglomeraciones. El parque está muy bien preparado con pasarelas y balcones que te acercan a las cascadas hasta casi tocarlas.

 Hay agua por todos lados, y la vegetación es frondosa y selvática. Se pueden ver tucanes y otras animales. Las vistas en todo momento son espectaculares, aunque hasta este momento no entendía muy bien porque es una de las maravillas del mundo. Cascadas hay por todos lados, sí, pero también hay en otros lugares. Debía tener paciencia y seguir disfrutando y visitando todo el conjunto de cataratas de Iguazú.

Una de las actividades que puedes hacer en Iguazú, es hacer una excursión por el río en unas barcazas, que te llevan contra corriente hasta algunas de las cascadas hasta ponerte debajo, en el entorno de la Isla de San Martín. Te calas hasta los huesos, pero es súper emocionante sentir como cae el agua sobre ti, y desaparecer bajo el torrente de agua. Piensas que el agua vaporizada que emana la cascada te va a tragar. Muy divertido y 100% recomendable.


Una vez recorrido gran parte del parque, casi al atardecer fuimos a la garganta del diablo. Casi 20 minutos de recorrido por pasarelas sobre el agua. Este río, el Iguazú es enorme, después se convierte en el río Paraná. A lo lejos una nube de agua se eleva a una veintena de metros sobre nuestras cabezas, no sé lo que nos espera en el lugar al que nos dirigimos pero todo el mundo que nos cruzamos está empapado.


Se escucha el estruendo constante de la caída del agua, y algo se intuye a lo lejos. Aceleramos el paso, queremos verlo de cerca. Cuando llegas al balcón que está sobre la garganta del diablo, no podía creer lo que estaba viendo. Una masa de agua inmensa a lo largo de 3 km de longitud y 80 metros de caída, precipitándose al vació a menos de 50 metros de mis pies. No sabía si reír o llorar, ante semejante espectáculo que ofrece la naturaleza en este lugar. Mi boca abierta, mis manos sujetando mi cara y sintiendo el agua que flota en el ambiente en todo tú ser. Sin duda alguna una de las cosas más bonitas y grandiosas que he visto en mi vida.


Terminamos la visita con un relajante paseo en canoa, por canales tranquilos y escondidos de los caminos habituales de los visitantes, en el que poder apreciar la vegetación y algunos animales. 

Fotos de Iguazú AQUÍ

Al día siguiente, llovía mucho así que decidimos no cruzar al lado brasileño de las cataratas, desde dónde parece ser que las vistas son mejores, aunque estás más lejos que en lado Argentino que como comentaba antes, estás literalmente sobre la caída de agua.

Y llegó el momento de cruzar a Brasil. Primero una despedida más, esta vez de mi querido amigo Walter, que se quedaba en tierra mientras veía en su cara la tristeza o melancolía de despedirse de alguien sin saber si lo verás algún día de nuevo. Para mí las despedidas desde hace tiempo que son motivo de alegría, porque en ese instante me vienen a la cabeza, los grandes momentos vividos con esa persona, y pienso en la suerte de encontrar a alguien con la que has disfrutado hasta ese momento, y probablemente lo seguirás haciendo. Quizás es una forma demasiado optimista o positiva de ver las cosas, pero si no hubiera un encuentro no podría haber despedida. Así que prefiero quedarme con lo positivo.

De Puerto de Iguazú a la frontera, hay como unos 15 minutos en colectivo, 8 pesos. Te bajas para sellar y el autobús público te espera para llevarte al lado brasileño de la frontera que está a otros 10 minutos. Ahí te bajas y el bus continúa, pero te dan un ticket para no tener que volver a pagar. Pasan cada 20 minutos. Así que me dirigí hacia la aduana. Eran las 4 pm, no cruzaba ni un alma, el único viajero en toda lo frontera era yo, además estaba lloviendo bastante.

No sé si sabíais que desde el pasado dos de Abril los españoles debemos cumplir los mismos requisitos para entrar en Brasil que los brasileños para entrar en España, que son: billete de salida, lugar de alojamiento, y demostrar mediante justificante de tarjeta de crédito que tienes 80 euros por día de estancia para gastar en el país. Es el único país de Sudamérica que nos pide esto, en el resto entramos como en casa, con el pasaporte y listo. Conforme he ido viajando más he ido entendiendo menos el concepto de frontera, llegando a la conclusión de que no debería haber fronteras. Cualquier ciudadano del planeta debidamente documentado, es decir, con su pasaporte en vigor debería poder visitar cualquier país de la Tierra. Después dentro de cada país mano dura con los delincuentes, pero si yo no lo soy, como la mayoría de los habitantes de cada país del planeta, libertad.

            Con todas estas ideas rondando mi cabeza, me situé en la ventanilla con mi pasaporte en la mano. Esperando los problemas e inconvenientes de no cumplir todos los requisitos, y ser español. No sabía cómo me las iba a arreglar para pasar. Pero en seguida me di cuenta que no iba a haber ningún problema. La chica de la aduana me sonrió como bienvenida mientras observaba mi pasaporte español. Me pregunto cuántos días iba a estar en Brasil y si tenía vuelo de salida. Le respondí tranquilamente y le devolví la sonrisa. Enseguida me puso el sello para 90 días en Brasil. Vamos que no tuve ningún problema y el trato fue excelente.

            De la frontera, a Foz de Iguazú y directo a la terminal para coger un bus a Florianópolis y descubrir las mejores playas de Brasil para hacer surf. Estoy contento de estar en Brasil, algo no planeado pero deseado. Es el país número doce que visito en este viaje, mi pasaporte ya tiene seis hojas completas de sellos de entrada y salida.

lunes, 11 de junio de 2012

PUNTA DEL ESTE: JOSÉ IGNACIO (URUGUAY) DEL 27 DE ABRIL AL 1 DE MAYO



Antes de llegar a Argentina, tenía como idea cruzarme a Uruguay desde Buenos Aires unos días, para conocer alguna de las playas de este país. Lo que no pensaba es que iba a poder visitar Punta del Este, uno de los lugares más exclusivos, concretamente Jose Ignacio, invitado por Yago, amigo de Fernando, e iba a poder convivir con ellos y su grupo de amigos durante cuatro días en su bonita casa.


El lugar espectacular, la casa encantadora y la playa, un larguísimo arenal con apenas alguna casita cerca de la orilla, preciosa. Sin duda una suerte poder disfrutar de este lugar de esta manera. Fotos de Jose Ignacio AQUÍ


El ambiente con este grupo, muy bueno, son un gran grupo sin duda. Buenas comidas, y sed, no pasamos, jaja. Nos reímos mucho durante esos cuatro días y por supuesto pudimos hacer surf. Las olas no fueron muy buenas, pero estar en el agua, ya merece la pena. Además viví una de las mejores experiencias del viaje, surfear con delfines, que se acercaron a mi hasta poder tocarlos, increíble. Qué gran sensación tener estos animales rodeándote en pleno mar abierto y poder jugar con ellos, desde luego no lo voy a poder olvidar en mucho tiempo.

Después de estos cuatro días, volvimos a Buenos Aires por un par de días más, de nuevo a casa de Fernando, para posteriormente comenzar con la ruta hacia el sur de Argentina.

Qué buena gente son los argentinos. Todas y cada una de las personas que he conocido en este país me han ofrecido todo, y se han desvivido por mostrarme lo mejor de su país, y lo mejor de ellos mismo, la verdad es que sin palabras. Me gustaría cuando vuelva a España, conocer todavía más sobre nuestra cultura, sobre nuestro país, sobre Zaragoza… ahora siento que tengo una gran responsabilidad, dar a conocer mi país y mostrarlo cuando tenga ocasión de la mejor manera posible. Es algo que a las personas que les pueda ofrecer esto, no van a olvidar jamás, y se sentirán agradecidas para toda la vida. Así es como me siento yo ahora