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Transporte: Autobús desde Vilnius a Gdansk. Salida a las 21.00 y llegada a las 7.15. Precio 31 euros. Pasamos la noche en ruta. Ni idea del paisaje, entre el blog, dormir y la noche...Fue duro en el bus, pero más o menos dormimos. Una avería nos hizo pensar lo peor, la alarma de la avería sonó durante dos horas, complicó el sueño. Llegamos un poco desubicados, 6 am, sin mapa del lugar y sin saber donde ir...además en Polonia no todo el mundo habla inglés, quizás menos de la mitad de los intentos, pero un abuelo con un polaco perfecto y lo mejor de sus gestos, nos dejo clara la dirección, al centro! Caminar con una mochila de 15 kilos no es fácil, tras 12 días con ella a la espalda, y por fin bien ajustada a la cadera (esto es importante mochileros, sino tus trapecios no aguantan...), me voy adaptando y soy capaz de andar con mayor alegría, aunque sean las 6.15 de la mañana. Una chica polaca paseando al perro (a esas horas, si), nos salva y nos indica un hostel céntrico, será nuestro nuevo hogar.
Alojamiento: Happy Seven Hostel. C/ Ul.Grodzca 16. 80-841 Gdansk. Poland. Unos 12 euros por noche y persona y con desayuno!! Y las pastas y aroces y demas eran gratis, solo tenías que cocinártelo tu. Para nuestra sorpresa, aquella chica nos envió al mejor hostel de todos los visitados hasta el momento en nuestro viaje, limpio y ordenado, muy céntrico, y como a unos 15 min. de la estación de tren. Una sala de estar muy acogedora, wifi, cocina y una atención del personal del hostel muy amable. No podías ir calzado, y esto es en el segundo que lo veo, es indicativo de hostel limpio y ordenado. Por poner una pega no tenía lavadora, así que ha tocado lavar en la pila la ropa interior y tender en la litera, pero ya no quedan camisetas limpias y no las lave porque no iba a dar tiempo a que se secaran, así que voy estirando la que llevo, espero que cuando llegue hoy al nuevo hostel, pueda hacer la colada. Compañeros de habitación múltiples y dispares, una teen mormona, 4 de sesenta polacas haciendo una ruta en bici, dos que ni idea, una argentina súper habladora y con ganas de aportar cosas de viajes, un indio, es decir, otro bonito cuadro cultural...
Lugares visitados: Otra ciudad mas para perderse paseando, con toda su arquitectura burguesa, religiosa, militar y portuaria con un legado de diez siglos de fascinante y tormentosa historia donde pasado y presente crean una armonía perfecta en un paisaje irrepetible, bañado por el río Modlwa. La iglesia Nuestra Señora de Gdansk, es el templo de ladrillo más grande de Europa, acoge el reloj astronómico que indica las horas, días y fechas de fiestas movibles y las fases de la luna, y al mediodía aparecen en el los reyes magos, los apóstoles y las figuras de Adán y Eva y de la muerte.. Iglesia de San Nicolás, escuchamos una misa cantada, todos puestos de rodillas, se podía palpar la fe, me impresionó. Como visita fuera de la ciudad cuyo traslado hicimos en un agradable paseo en barco: Westernplate. Lugar donde comenzó la segunda guerra mundial, y donde los alemanes comenzaron a desplegar todo su poderío de guerra. Tardaron menos de 6 días en conquistar este lugar. Recorrer este lugar entre trincheras, bunkers y torres de vigilancia, con fotos de la conquista, hace pensar sobre las guerras y su fatalidad. Primeras fotos de Hitler en acción, mente perversa y privilegiada para su fin, terrible! Por las noches visita obligada a Sopot, donde se concentra toda la juventud de la zona, a 15 min de Gdansk en tren (gratis para los españoles). Fiesta playera hasta altas horas de la madrugada Dream club y otro situado encima de un restaurante mexicano llamado Spain, nos dieron nuestra dosis de fiesta semanal típica polaca, eso nos dijeron...Por útimo visita al castillo de Malbork, gran recinto medieval construido por los alemanes hacia el XV y recontruido en el XX tras la primera y segunda guerra mundial.
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Clima: perfecto, seguimos con el buen tiempo, por el día calorcito, por la noche una chaquetita. Es la playa de los Varsovianos, se ponen como cangrejos.
Moneda: Zlotich
Vida al día: 30 euros
Polacos/as: Ellos aparentemente toscos, fuertes e introvertidos, normalmente con la cabeza rapada y rubios, pero sorprendentemente amables y serviciales cuando los necesitas. Ellas más descaradas cuando toman la iniciativa o todo lo contrario tímidas extremas, con una belleza típica del este pero dentro de la normalidad.
SENSACIONES:
No se porque pero tenía ganas de conocer Polonia, es un pais que aunque desconocido para mí, me llamaba la atención, y empezar por Gdansk ha sido un acierto, con su ambiente tan cultural pero playero.
Las primeras tomas de contacto con las tan afamadas guerras mundiales, siguen despertando en mi la curiosidad por conocer todavía más. Y es conocer la historia en el lugar que sucede la historia no tiene valor, lo escuchas y lo ves, formas parte de ella con tu imaginación.
Estos días son un de un ritmo de viaje bastante fuerte, no paramos de ver cosas, descasamos regular y comemos a veces bien, a veces regular, otra veces nos saltamos comidas, no hay rutinas... todo esto cansa. Y se mezcla el disfrute con el cansancio, y disfrutar cansado. Pienso en mi viaje largo, muy largo, y solo, voy a tener que organizarme bien...
Me anima mucho conocer a gente, que viaja 3 meses, 6 meses, 18 meses..., pero cuanta cantidad de gente hay itinerando por el planeta, todos adaptados, eso si, sin conocer el proceso de adaptación, aunque algunos puntos son comunes, el idioma, organizarse...
Con Toni, es súper fácil viajar, mucha experiencia. El otro día contamos los países que habíamos visitado cada uno, el 45 países!!! Yo 24, ya van siendo, pero la experiencia como en todo es grado, y tener una personalidad exploradora nata, a veces es una ventaja viajando, pero impone un ritmo terrible, y eso que dice que ya esta mayor. No es que haya bajado el ritmo, es que yo he aprendido a llevar un ritmo mayor. Aunque reconozco que a mi me gusta viajar más relajado, seguramente si fuera solo, vería menos cosas, iría a otro ritmo, tengo otra personalidad viajera. Creo que esto es lo que funciona como equipo en ruta.
Ha sido un gran fin de semana en Gdansk, hemos visto muchas cosas y hemos disfrutado. Incluso nos han hecho corro bailando algo parecido a flamenco. Claro somos españoles, el peor de nosotros sabe como tocar cuatro palmas y mover un poco la cadera, fuimos reyes por una canción, jaja!
Y seguimos viajando....
