Durante un mes, La Sombra del Viento, de Carlos Ruíz Zafón, me ha acompañado en salas de espera de aeropuertos, autobuses, vuelos, y carreteras, y fue en el trayecto de Tepic a Puerto Vallarta donde termine de leer el libro.
No recuerdo el lugar, era algún punto de México sin importancia. El autobús no muy cómodo, de noche y poca luz… pero sí recuerdo la emoción al descubrir el final del libro, a través de la lectura de sus páginas. Inevitable para mí derramar algunas lágrimas por primera vez, con la lectura de un libro.
Quizás la añoranza de mis sobrinos, quizás las numerosas noticias en los últimos meses de algunos de mis mejores amigos, caminando en la vida hacia la paternidad, o poder mirar a mamas muy jóvenes directamente a los ojos,aquí en México, me ha sensibilizado enormemente en este aspecto, despertando un sentido nuevo para mí.
Por lo visto La sombra del Viento tiene continuación. Estoy esperando que alguien, vuelva a hacerme un recomendación igual, para que siga teniendo buena compañía, y poder pensar sobre la vida, los personajes del libro y su relación con la vida, o mi último paseo acompañado por el escenario del libro, Barcelona. Desde luego este libro ya está entre mis favoritos. Gracias de corazón!
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