Terminada
la vuelta a Argentina, recorriendo más de 10000 km, todos y cada uno de ellos
por tierra, y disfrutando mucho de esta gran tierra, tocaba parar para poder
avanzar, porque tengo que reconocer que estaba algo cansado de tanto
movimiento.
Y es que
viajar es lo que tiene, implica un esfuerzo, para conseguir conocer lugares,
vivir experiencias, interactuar con la tierra que pisas y sus gentes, pero
además hay que añadir que tu mente, muchas veces viaja un poco más allá de
dónde pisan tus pies.
Así que
estos días muy relajados, y la verdad a gusto. Fin de semana, salir con amigos,
que hacía mucho que no me tomaba un fernet y una cerveza, comida familiar,
paseo a caballo, tomar mate…y estos días, algo de deporte, descansar, escribir,
leer, y preparar los siguientes pasos en el camino. Como tiene que haber
momentos para todo, pues eso, este es el momento de descansar un poquito.
Mañana
viernes continúo hacia el norte de Argentina, la que será mi última parada en
este gran gran país, y creo que he reservado, según dicen muchos, el plato
fuerte. Cataratas de Iguazú, situadas cerca de la triple frontera entre
Paraguay, Brasil y Argentina, y catalogada como una de las siete
maravillas naturales del mundo, es espectáculo
de la naturaleza que tengo ganas de ver y sentir. Allá vamos.
Después
cruzaré la frontera para visitar el país número 13 de este continente y
probablemente último de este viaje. Lo que espero sea un gran final, aunque
primero tengo que entrar, porque desde el pasado dos de abril las condiciones
de entrada para españoles en tierra brasileña se endurecieron, y tengo que
preparar una serie de documentos y cumplir unos requisitos que no me han pedido
en ningún otro país de Latinoamérica. Confío en no tener problemas.
Ayer me
bloquearon la tarjeta de crédito, porque al parecer hice una operación en un
comercio sospechoso para 4B y automáticamente mi banco la bloqueo de manera
definitiva, lo que puede ser un contratiempo importante, cuando estás lejos de
tu casa, sino llevas una tarjeta de repuesto, cosa que no es mi caso, porque ya
venía prevenido para un suceso de este tipo. Precisamente en Brasil uno de los
requisitos es llevar una tarjeta de crédito, en el que tengas un límite de
gasto superior a la suma producida de 80 euros por día de visita en el país…espero
no tener problemas.
Ahora que
estoy al día con el blog, voy a intentar actualizar todo lo que me falta de
Perú, Bolivia y el norte de Argentina, lo que supone casi dos meses de viaje,
poco a poco…
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